Siempre me han gustado los bollos de mantequilla, una especie de bollo tipo brioche relleno de mantequilla de pastelería. Y son típicos de Bilbao, tanto como el pastel ruso o la carolina (estos dos los tengo pendientes de hacer). Siempre que vuelvo a Bilbao me como uno para recordar viejos tiempos. Y al principio también me los traís a Londres y los congelaba. No quedaban igual pero me quitaban el capricho. El otro día hice mantequilla pastelera porque iba a hacer un pastel ruso pero tuve un pequeño accidente con el merengue y no pudo ser. Como ya tenía la mantequilla y por no tirarla busqué una receta para hacer estos bollos. Seguí la de Cocinando con Goizalde con algunas modificaciones.
Ingredientes para la mantequilla:
- 250 gramos de azúcar
- 100 ml de agua
- Un poco de vainilla
- 3 yemas de huevo
- 250 gramos de mantequilla a temperatura ambiente
Ponemos el azúcar, la vainilla y el agua en un cazo a fuego medio alto. Cuando tengamos un almíbar grueso retiramos. En un bol resistente al calor batimos las yemas de huevo. Sin dejar de remover echamos el almíbar aún caliente. Echamos la mantequilla en trozos poco a poco y batimos hasta tener una mantequilla cremosa. Cuantos mas minutos batamos mas cremosa y blanca quedará la mantequilla.
Ingredientes para los bollos:
- 80 ml de leche
- 40 gr de azúcar
- 60 gr de mantequilla a temperatura ambiente
- 1 sobre de levadura seca de panadero
- 2 huevos
- 250 gr de harina normal
- 50 gr de harina de fuerza
- Media cucharadita de sal
- 1 huevo batido para pincelar y azúcar para decorar
En un bol mezclamos la leche con el azúcar y la mantequilla. Añadimos los huevos y seguimos mezclando. Añadimos el sobre de levadura con la mitad de la harina. Mezclamos hasta que la masa sea homogénea. Echamos el resto de la harina con la sal y mezclamos bien hasta tener una bola maleable y que no se pegue. Tapamos con un trapo y dejamos reposar en un sitio cálido hasta que doble su volumen.
Aceitamos la encimera y nuestras manos y volcamos la masa. Amasamos durante 5 minutos y le damos forma de cilindro. Vamos cortando los bollos.
Colocamos los bollos en una bandeja con papel de hornear y tapamos con un trapo. Deben doblar su volumen. Cuando hayan doblado los pintamos con huevo batido y decoramos con un poco de azúcar por arriba.
Los metemos en el horno (que tendremos calentado a 250 grados) durante 7 minutos o hasta que estén dorados. Una vez fríos los abrimos por la mitad y rellenamos de mantequilla.
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